El aceite de Oliva Virgen Extra (AOVE) es el zumo de aceituna 100%. Para elaborarlo, se utilizan las aceitunas en su momento óptimo de maduración para obtener un aceite de máxima calidad. Con unas excelentes características de sabor y aroma. El último proceso al que se somete a estos aceites antes de envasarlo es el filtrado, que consiste en eliminar las partículas en suspensión qué tiene.
Es importante reseñar que un Aceite de Oliva sin filtrar no es mejor o peor que un Aceite de Oliva filtrado. Ya que, mantiene tanto su acidez como sus propiedades organolépticas intactas en ambos tipos de aceite.
Para preservar todo lo posible estos compuestos originales, el proceso de filtrado se hace de forma totalmente natural mediante un filtro de “papel”.
Pasando el aceite a través de múltiples capas de celulosa que capturan la humedad y las impurezas sólidas. El aceite de Oliva Virgen Extra filtrado queda totalmente limpio y brillante.
Con la filtración se puede conservar todo su sabor y propiedades, siempre que se mantenga alejado de la luz y el calor.
