El nieve del temporal Filomena ha hecho daño sobre todo en los olivos más jóvenes, donde el peso de la nieve ha roto las principales ramas cortando el tocón del árbol.
Depende de la duración de las bajas temperaturas y la magnitud del frío podrían llegar a provocar daños en los árboles. Afectando el potencial productivo de años futuros y tendrán un impacto negativo en sistemas de riego. Y, a su vez, seguirán perjudicando a los cultivos leñosos.
Habrá que estar atentos a cómo evoluciona esta situación.